Además, acuerda la paralización de los expedientes de expropiación de las fincas afectadas por las referidas obras.
El Tribunal Supremo ha ordenado en un auto
la ejecución de una sentencia dictada por este mismo órgano que declaró
nulos de pleno derecho los decretos para corregir la sequía en las
cuencas de los ríos Guadiana, Guadalquivir y Ebro, por lo que paralizan
las obras de trasvase del río Castril (Granada).
El auto de la
Sala de lo Contencioso-Administrativo, sección quinta, del alto
tribunal, ordena "la inmediata
paralización" de la ejecución de las obras de emergencia para la
conducción de abastecimiento a la localidad de Baza desde el embalse
del Portillo.
Además, acuerda la paralización de los
expedientes de expropiación de las fincas afectadas por las referidas
obras, a cuyo fin se dirigirá, indica el Supremo, comunicación al
Estado, a través del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y
Marino.
La ejecución de esta sentencia, según la Plataforma por
la Defensa del Río Castril, afectaría asimismo al auto del Juzgado de
lo Contencioso Administrativo 4 de Granada -también recurrido-, que por
su parte levantó cautelarmente la paralización de las obras del
trasvase decretada en su día por el Ayuntamiento de Cortes de Baza.
Este Ayuntamiento paralizó esas obras del proyecto basándose
precisamente en la sentencia del Supremo, cuya ejecución ha sido
acordada recientemente a través de un auto.
Desde la plataforma
han valorado esta última resolución, al considerar que respalda todas
sus tesis de que las obras "son ilegales además de innecesarias, por
carecer del respaldo jurídico".
Además, reclaman "un poco de
cordura y sentido común" tanto a la Confederación Hidrográfica del
Guadalquivir como al Gobierno, para que busquen ahora una alternativa
al trasvase "consensuada con todas las partes afectadas".