Según las estimaciones de la Organización Interprofesional del Huevo y sus Productos (Inprovo).
La adaptación de la normativa europea de
bienestar animal tendrá un coste próximo a los 600 millones de euros
para la avicultura de puesta española, según las estimaciones de la
Organización Interprofesional del Huevo y sus Productos (Inprovo).
La directora general de Inprovo, Mar
Fernández, ha explicado que esta inversión se destinará a adaptar las
jaulas para los cerca de 40 millones de gallinas que podrían quedar tras
la reconversión.
De este modo, Fernández ha detallado que el
coste de las nuevas instalaciones supone un desembolso de unos 15 euros
por gallina en las nuevas jaulas acondicionadas.
Los últimos
datos oficiales publicados por el ahora Ministerio de Agricultura,
Alimentación y Medio Ambiente datan de 2010 y cifraban el censo de
ponedoras en 44 millones de ejemplares, alojadas en 1.370 explotaciones.
A la espera de los registros definitivos, Fernández ha constatado
que, además de reducirse el censo de ponedoras, "es seguro que en el
proceso de adaptación se cerrarán algunas granjas que no podrán
afrontarlo".
Asimismo, ha recordado que las estimaciones
publicadas por la Unión Europea para España prevén un descenso de un 10 %
en la producción para 2012.
En este contexto, la directora
general de Inprovo ha alertado de que, en el plazo hasta finalizar la
reconversión, podrían producirse "desajustes" en la oferta de huevos que
llegan a los diferentes canales de comercialización.
Según ha
subrayado, las explotación están haciendo un "enorme esfuerzo" para
invertir en una coyuntura económica desfavorable y los costes de
producción se incrementan con el nuevo sistema.
Fernández ha
considerado "determinantes" para la continuidad de un "buen número" de
empresas del sector la capacidad para trasladar estos "sobrecostes" a lo
largo de la cadena de valor y que no se lleven a cabo importaciones de
países terceros con menores requisitos de producción.
En
cualquier caso, ha asegurado que el Ministerio sigue las indicaciones de
la Unión Europea (UE) para que todas las instalaciones de avicultura de
puesta estén adaptadas en julio de 2012.
Para ello, ya se
están realizando las comprobaciones oportunas en las granjas para
confirmar que cumplen con los planes de inversión previstos y
comunicados a las autoridades competentes, y aquellos que no lo hagan
perderán su registro como productores, ha indicado.
La
normativa europea obliga a que las gallinas ponedoras dispongan a partir
enero de 2012 de al menos 750 centímetros de superficie de la jaula, de
un nido, de una yacija que permita picotear y escarbar, de un bebedero
apropiado y de dispositivos de recorte de uñas.