La organización agraria UPA ha acusado de la caída del censo de ovino y de caprino al incremento de los costes de producción de los ganaderos y al bajo precio de perciben por sus producciones.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos
(UPA) ha achacado la caída del censo de ovino y de caprino al
incremento de los costes de producción de los ganaderos y al bajo precio
de perciben por sus producciones.
Según los últimos datos
publicados por la Comisión Europea (CE), el censo de ovino se situó en
España en 17,03 millones de animales en diciembre de 2011, un 8,3 %
menos que en el mismo periodo del año anterior; mientras que el de
cabras se contrajo un 7,3 %, hasta 2,69 millones de animales.
La organización agraria ha denunciado que muchos
ganaderos se han visto obligados a cesar su actividad "ahogados por las
deudas e incapaces de resistir la pérdida de rentabilidad".
UPA ha recordado que desde el año 2009, el precio medio del pienso para
corderos y chivos de engorde se ha incrementado más de un 20 % y que se
esperan nuevas subidas en 2012.
Asimismo, han reseñado un
encarecimiento del gasóleo agrícola en más de un 40 % y que la energía
eléctrica subirá un 7 % este mes, entre otros insumos.
Por el
contrario, la organización ha denunciado que el precio de la leche y de
la carne de oveja y de cabra no se ha incrementado en la misma medida,
por lo que son los ganaderos quienes han asumido "una tremenda pérdida
de rentabilidad".
Desde la organización se ha argumentado que
el precio en origen la leche de oveja se mantuvo en 2011 a precios
similares a 2010 y que en lo que va de 2012 ha experimentado un ligero
incremento de entre un 2,8 % y un 5,8 %.
Por su parte, la
leche de cabra arrastró durante todo 2010 el hundimiento del precio en
origen que provocó la reducción de las importaciones francesas a finales
de 2009, pero que en 2011 y lo que va de 2012 su precio ha ido
recuperándose "aunque no lo suficiente".