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Un año de transición. Es como podría definirse al 2014 que ahora nos deja y donde ya han convivido dos sistemas de gestión de ayudas pertenecientes a la nueva y vieja PAC. A esperas de que en pocas semanas se conozca al fin el mapa de regiones productivas que ya dará una idea más o menos clara de cómo quedarán los pagos en la provincia, no hay que olvidar que, ayudas aparte, el año que nos deja pasará a la historia como uno de los que batieron récord en producción de aceite de oliva y en comercialización de nuestro oro líquido. Una cosecha nacional de 1,8 millones de toneladas de aceite, unas salidas al mercado de 137.000 toneladas mensuales de media y el puesto número uno del aceite para español en los mercados estadounidense y japonés no son cuestión baladí. Sin embargo, frente a la apertura de mercados de la pasada campaña, el 2014 termina con la confirmación de la peor de las previsiones: ni Jaén, ni el resto de Andalucía ni España tendrán apenas aceite para el periodo 2014-2015. Los olivares que ahora se varean están pelados. La sequía y el agotamiento del árbol han mermado la cosecha hasta cifras similares a las de hace dos años. En esta situación, la bonanza o no del sector tendrá que fijarse por la regulación de los precios que, aunque ahora caminan al alza, difícil lo tendrán para compensar los ingresos provocados por la escasez de producto.

Aceite: La situación se invierte de nuevo. De una cosecha récord a una producción casi simbólica

La campaña de aceituna y aceite de oliva 2013/2014 se caracterizó por una producción récord que vino a paliar el déficit productivo del año anterior y que contrasta con la escasa cosecha que ahora se recoge.

En el periodo 2013/2014 se partía con unas existencias bajas (300.700 toneladas) y se alcanzó una producción récord que llegó a las 1.777.374 toneladas en todo el país, de las que 751.618 (según los datos de la AICA) correspondieron a Jaén. Esta cifra, sumada a las importaciones, hizo que se alcanzara una disponibilidad de aceite de 2.139.100 toneladas, una vasta cifra que, sin embargo, tuvo cabida en el mercado. No en vano, el consumo alcanzó 530.500 toneladas, recuperándose en un 9% con respecto al año anterior, mientras que la exportación sumó 1.100.800 toneladas, lo que supuso una estrepitosa subida del 71% gracias a la que se dio salida a la importante producción de aceite.

Por tanto, si hablamos de campaña 2013-2014 se puede afirmar con rotundidad que se trató de una campaña récord, tanto en producción como en salidas al mercado, con una media 137.000 toneladas mensuales entre el consumo interno y las exportaciones. En esto también influyeron las escasas producciones en países competidores como Grecia, Turquía y Túnez, así como iniciativas abanderadas por la Interprofesional del Aceite de Oliva que han logrado que, por primera vez, España se convierta en el principal proveedor de aceite a Estados Unidos y Japón por delante de Italia.

Si se habla de precios, el contexto no es tan positivo. Al comienzo de la campaña, la gran producción pesó en las cotizaciones, con valores muy a la baja. Sin embargo, según fue avanzando el ejercicio y se comprobaron las malas perspectivas para la actual cosecha, así como el hecho de que las ventas sobrepasaron las estimaciones más optimistas, los precios fueron recuperándose progresivamente hasta alcanzar valores más que aceptables en los meses de verano.

El precio medio del kilo de aceite (incluidas todas las categorías pasó de 1,85 euros a principios de junio a 2,52 a finales de agosto. La media de campaña, y según los datos del sistema poolred, fue de 2 euros por kilo, aunque se registraron picos de 2,70 en categorías como el virgen extra.

Campaña 2014-2015

Una vez finalizada la campaña 2013, las existencias se cifraron en 497.000 toneladas, lo que supone un 66% más que en la campaña anterior. Sin embargo, estas importantes existencias contrastan con la escasa producción que se espera para esta campaña 2014-2015 y que, según los datos del aforo de la Junta de Andalucía, alcanzarán 780.000 toneladas en toda España (825.000 según el Ministerio), de las que 270.000 toneladas corresponden a Jaén.

Se trata, por tanto, de una situación muy similar a la que ocurrió hace dos años, cuando una campaña récord tuvo que administrarse para dos años.

Con respecto a los precios, la tendencia actual es a la subida, con cifras que ya alcanzan los 3 euros por kilo de aceite en su categoría extra.

PAC

Desde el pasado mes de septiembre de 2013 y hasta la actualidad, los cambios de la Reforma de la PAC a partir de 2015 y cómo se traducirán para el agricultor cuando se comience a tramitar las nuevas subvenciones han sido tema de debate e incertidumbre. No en vano, a pocos meses de que se empiecen a tramitar las nuevas ayudas y casi dos años después de que hubiese acuerdo europeo, todavía queda por concretar lo que el sector ansía saber: cómo quedarán finalmente las ayudas con el nuevo modelo de PAC para el periodo 2015-2019.

En la pasada campaña ya se inauguró el periodo de transición entre el Pago Único y el sistema de ayudas que se tramitará a partir de 2015. Con respecto a este último, aún habrá que esperar hasta que se conozca cómo quedarán finalmente las ayudas para Jaén. ASAJA confía en que el Ministerio cumpla con lo prometido ante la organización por el hoy secretario general de Agricultura y entonces director general de Producciones y Mercados del Ministerio de Agricultura, Carlos Cabanas, que el 8 de abril viajó a Jaén para explicar a los agricultores de ASAJA todo lo relacionado con la PAC y cómo se aplicarán las ayudas a partir del año que viene y cuando afirmó que los trasvases de ingresos serán mínimos. Habló también de la PAC a los agricultores el secretario general de Agricultura, Fernando Miranda. Fue en Úbeda el pasado mes de septiembre en un encuentro organizado por ASAJA, donde ya se dieron las claves sobre la estratificación de las ayudas en las que se basarán las comarcas agrarias.

Términos como Agricultor Activo, Derechos de Pago Base y cómo se calculará su valor inicial, regiones productivas, pago verde o greening son términos que se implantaron poco a poco en la burocracia rural a lo largo del pasado año y que en unos meses deberá manejar todo agricultor que pretenda acceder a la subvención europea.

Convenio campo

El pasado 1 de diciembre se firmó el convenio del campo. Finalmente y tras el acuerdo con los sindicatos el convenio tendrá vigencia de cuatro años, es decir, para las campañas de recogida de aceituna 2014-2015; 2015-2016; 2016-2017 y 2017-2018. Pese a que en un principio dicho convenio estaba acordado para tres años, a última hora patronal y sindicatos llegaron a acuerdo y se consideró apropiado prorrogarlo a otra campaña con el fin de garantizar la paz social en el campo el mayor tiempo posible y teniendo en cuenta la especial y difícil situación a la que se enfrenta el campo en un año con una cosecha pésima y con la campaña de recogida ya empezada.

La subida salarial es de un 0,6% para la campaña 2014-2015, lo que supone una media de unos 30 céntimos por jornal. En las dos campañas sucesivas se ha establecido un techo del suelo del 0,4% y un techo del 1%. Por tanto, si el IPC del año que viene sube entre un 0,4% y un 1%, se aplicará como subida el IPC. En caso de que suba por encima del 1%, se aplicará una subida del 1%. Por último, y en el caso de que el IPC se sitúe por debajo del 0,4% se aplicará un incremento del 0,4%. En cuanto a la cuarta campaña regulada en el convenio, la de 2017-2018, se ha acordado un suelo del 0,5% y un techo del 1,4% .

Este convenio dinamiza la economía de la provincia y garantiza la paz social en el campo y la “no pérdida” de poder adquisitivo de los trabajadores, condición fundamental para refrendar dicha paz social en un año difícil debido a la escasez de cosecha. 

ASAJA Joven

En otoño se creó la sectorial de ASAJA-Joven. Se trata de una rama de ASAJA formada por jóvenes (en agricultura se considera como tales a los menores de 40 años) que garanticen el relevo generacional en el campo. ASAJA Joven destaca el sector primario como una oportunidad laboral para mucha gente joven, que, aun teniendo sus miras en otros sectores, han apostado por el agropecuario como una alternativa, sobre todo teniendo en cuenta los altos índices de paro de jóvenes en Jaén, que rondan el 66% de la población.

Actualmente, ASAJA Joven de Jaén cuenta con una gestora que preside Miguel del Moral. Espera constituirse formalmente a lo largo del próximo año.

Entre algunas de las primeras peticiones de ASAJA Joven de Jaén, destacan las relacionadas con las Ayudas a la Primera Instalación de Jóvenes. No en vano, dichas ayudas (pendientes de abrir al cierre de este informe), acumulan impagos y falta de presupuesto, a pesar de que gran parte de su financiación, al igual que las destinadas a la jubilación anticipada, se hace con fondos europeos.

Desarrollo Rural

La falta de sensibilidad, traducida en la pérdida de miles de euros, de los planes de desarrollo rural ha sido uno de los puntos negros del año. En el mes de junio, ASAJA-alertó de que a falta de seis meses para cerrar el PDRA anterior 2007-2013, quedaba aproximadamente un 40% de presupuesto sin ejecutar, lo que supone en torno a unos 500 millones de euros. Lo denunció y resaltó el hecho de que hasta la propia Unión Europea ha elaborado informes sobre su preocupación por el grado de ejecución del programa en Andalucía. En esta línea, e hilando con las solicitudes de los jóvenes agricultores, la organización alertó de que que quedan por pagar ayudas de 2011 y 2012 cuando se están abriendo nuevas líneas a finales de 2014. ASAJA exigió a la consejera que se paguen todas las ayudas pendientes antes de que se acabe el plazo para invertir el dinero y se pierdan esos fondos de financiación que tanta falta hacen a los agricultores. A día de hoy, y a punto de cerrar 2014, ni se ha ejecutado el PDR, tirando a la basura miles de euros procedentes de Europa, ni se han solucionado todos los impagos de ayudas pendientes, quedando clara así la nefasta gestión de Elena Víboras al frente de la Consejería de Agricultura.

Nefasta producción para los algodoneros

Tras la escasísima producción de algodón causada por las plagas y por la imposibilidad de realizar las plantaciones a tiempo, se logró, bajo petición de ASAJA, que se declarara la excepcionalidad de la campaña de algodón con el fin de cumplir con las primas europeas.

Tarifas eléctricas

La subida de las tarifas eléctricas y la importante merma  económica que esto conlleva para unos agricultores ya de por sí asfixiados por el alto coste de los ímputs de producción fue otro de los temas más espinosos del año. ASAJA-Jaén participó, además, en la manifestación en contra de estas tarifas que se celebró el pasado 26 de febrero de 2014 en Sevilla.

Sin embargo, 2014 termina con la esperanza de que la Ministra Isabel García Tejerina cumpla con lo prometido al sector e introduzca en la reforma fiscal una exención del 85% del impuesto especial de la electricidad para los regantes y un ajuste en el régimen de módulos para compensar el incremento de costes por la nueva tarificación.

Reactivación de las negociaciones y obras de la A-32

ASAJA-Jaén ha seguido, y sigue, luchando por solucionar el despropósito de la A-32. Una vez presionado para lograr que se abra una entidad que gestione con los expropiados los justiprecios por sus tierras, continúa expectante para que dichas gestiones se hagan al completo. Además, también por las presiones de ASAJA, entre otras, se han retomado las obras de una vía paralizada durante el mandato de Zapatero que se convierte en una arteria fundamental de comunicación para la provincia.

Ganadería

La incertidumbre es la palabra que define al sector ganadero durante el año 2014. Incertidumbre ante el periodo 2015-2019 tras no saber aún de qué manera van a llegar a los ganaderos las ayudas de la nueva PAC y si irán asociadas y vinculadas al mantenimiento y la explotación de las ganaderías rentables, tal y como considera ASAJA. Los ganaderos de Jaén quieren que dichas subvenciones supongan un complemento a la renta de la explotación y no la renta en sí misma.

Por otro lado, las Asociaciones de Defensa Sanitaria Ganadera (ADSG), las encargadas de la sanidad animal, siguen sufriendo el maltrato de la Junta de Andalucía. No en vano, la Administración autonómica ha dejado de invertir en programas sanitarios obligatorios, tal y como lo hacía anteriormente, para dejar a los ganaderos en manos de fondos europeos (mucho menores que lo que aportaba antes la Consejería, pero que son los únicos ahora) destinados a programas de saneamiento ganadero como la detección de la brucelosis caprina, ovina y bovina y de la tuberculosis bovina. Es decir, que la Junta ha dejado de invertir las partidas de su propio presupuesto en sanidad ganadera tal y como se hacía en años anteriores. A lo largo del año que nos deja se siguieron imponiendo cada vez más exigencias al ganadero, al mismo tiempo que se le recortaban las ayudas vía ADSG, tanto económicas como logísticas. Si a eso le sumamos la falta de previsión e improvisación de la que hemos sido testigos temas como la lengua azul, concluimos un 2014 en el que los ganaderos, organizados en ADSG tienen más trabajo y responsabilidades y un apoyo casi nulo.

Tampoco se han pagado las ayudas a los programas voluntarios de saneamiento ganadero del 2013 (que se han quedado reducidos a un 38%) y que son válidos para la identificación electrónica de pequeños rumiantes o para programas de lucha contra algunas zoonosis transmisibles, enfermedades que pueden afectar al hombre.

Por último, y en el apartado de desarrollo rural, siguen sin pagarse ni resolverse expedientes de ayudas agroambientales de 2013 y de 2014. A la vez que el acceso a la información de dichos expedientes sigue siendo demasiado tortuoso. Para concluir el año se han convocado otro tipo de ayudas, como las destinadas a bienestar animal que, si bien no pueden despreciarse, cuentan con un presupuesto pírrico por lo que resultan mucho menos interesantes.