En la localidad almeriense de Palomares cayeron hace 46 años cuatro bombas de EE.UU. con material radiactivo
La limpieza radiactiva de Palomares, en
Almería, donde hace 46 años cayeron accidentalmente cuatro bombas de
EEUU con material radiactivo, "sigue en la agenda bilateral" de los
gobiernos de Washington y Madrid.
Así coincidieron en señalar
el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, y el
embajador de EEUU en Madrid, Alan Solomont, durante la siembra simbólica
de un madroño para conmemorar el Día Internacional del Medio Ambiente
que se celebra hoy.
Aunque apuntaron que este encuentro,
encaminado a "reforzar la colaboración en materia de medio ambiente", no
estaba destinado a temas como el de Palomares, los dos reconocieron que
es un asunto al que sus respectivos gobiernos dedican "interés y
tiempo".
"No está fuera de agenda y tiene todo nuestro
interés", subrayó Solomont en el jardín de su residencia
particular, donde, junto con Ramos, sembró un madroño, símbolo de Madrid
y especie elegida por el secretario, nacido, según él mismo señaló, en
esta ciudad.
El madroño comparte espacio con el huerto
ecológico que la familia Solomont cultiva cerca de la piscina, siguiendo
el ejemplo de la propia Michelle Obama, en la Casa Blanca.
En
el de la embajada madrileña, confesó el embajador, se cosechan todos
los ingredientes necesarios para hacer un gazpacho, un plato típico
español apreciado por el diplomático.
Según Solomont,
iniciativas como estas, "aunque parezcan poco", son un ejemplo de "las
medidas individuales que todos podemos hacer para proteger el planeta".
El embajador recordó que este año se conmemora el 40 aniversario de
la Conferencia de Estocolmo (1972), la primera Cumbre de la Tierra, que
estableció un interés global por el medio ambiente y los recursos
naturales.
Sobre el madroño destacó que los arboles son
importantes para la naturaleza y la economía y eficaces captores de CO2 y
tienen una mayor permanencia en la tierra que cualquiera de los
presentes en el acto, incluso que él mismo en la Embajada, de donde en
algún momento se irá, "dejando atrás lo sembrado".
Tras la
breve ceremonia, Ramos destacó lo oportuno de este gesto diplomático, a
pocos días de iniciarse en Brasil la conferencia Río+20, que "vuelve a
poner el medio ambiente en lo más alto de la agenda internacional".
Se espera que el encuentro establezca la necesidad de que el concepto
"desarrollo sostenible" esté presente en todas las actividades
sociales, políticas y económicas. Desde el Ministerio de Medio
Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente "no imaginamos un desarrollo
que no sea mas verde", declaró.
Sobre la colaboración en
materia de Medio Ambiente con Estados Unidos, Ramos, que habló algunas
palabras en inglés, destacó que "hasta ahora ha sido ejemplar".
Las últimas declaraciones oficiales sobre la situación de la
descontaminación de Palomares se emitieron el pasado mes de febrero en
Washington, donde el Departamento de Estado emitió un comunicado que
descartó haberse alcanzado una "decisión final" sobre el asunto.
La nota salía al paso de unas declaraciones del ministro español de
Asuntos Exteriores, Jose Manuel García-Margallo, quien un día antes
adelantó la posibilidad de que Estados Unidos se hiciera cargo de los
residuos radiactivos identificados en Palomares.