Los responsables de las cofradías se han reunido con Arias Cañete para tratar los asuntos que más preocupan a la flota de bajura.
La Federación Nacional de Cofradías Pesqueras
ha pedido al ministro de Agricultura, Alimentación y Medio
Ambiente, Miguel Arias Cañete, ayudas por el encarecimiento del gasóleo,
así como apoyo para conseguir que la flota española vuelva a faenar en
Marruecos.
Los responsables de las cofradías se han reunido
con Arias Cañete para tratar los asuntos que más preocupan a la flota de
bajura, entre los que destacan la reforma de la Política Pesquera
Comunitaria (PPC), la suspensión del pacto con Marruecos y la crisis del
gasóleo, según ha declarado a la prensa el presidente de la Federación,
Genaro Amigo.
Respecto al convenio con Marruecos, Amigo ha
afirmado que es "muy necesario para Andalucía y Canarias, y para flotas
como la de Tarifa (Cádiz), sacar un acuerdo que por lo menos les permita
seguir faenando".
Los barcos afectados por la falta de
acuerdo con Rabat están a la espera de que se hayan efectivas las ayudas
que anunció el ministro, para compensarles por el abandono del caladero
marroquí, pero en la reunión "no se ha hablado de fechas", según Amigo.
La Unión Europea (UE) ya ha aprobado su autorización oficial para que
Bruselas negocie con Marruecos un nuevo compromiso y el ministro tiene
previsto desplazarse a ese país para potenciar esas conversaciones.
Las cofradías también han pedido apoyo por la coyuntura de los
precios del combustible, porque es "un problema muy delicado" y las
cotizaciones se acercan a los niveles de 2008, año en que los pescadores
protagonizaron fuertes protestas en los puertos.
Las
cofradías españolas ya pidieron ayuda a la comisaria europea de Pesca,
María Damanaki, pero Bruselas "ha dicho que no hay un duro" y que los
pescadores solucionen esta cuestión "con su Gobierno".
En este
sentido, Amigo ha señalado que el Ministerio les ha transmitido que
"estamos en un momento muy delicado de la economía".
Los
pescadores han expuesto que hay incertidumbre y que sería necesario, o
bien que bajara el carburante o que subieran los precios que perciben
por su pescado o marisco.
En cuanto a la reforma de la PPC,
las cofradías, en nombre de los barcos de bajura, han mostrado su
rechazo al proyecto de la Comisión Europea (CE) de crear un mercado de
traspaso de cuotas entre los barcos de un país, una idea que, por el
contrario, gusta a la flota de altura.
La Federación también
ha criticado la intención de llegar a un objetivo de "descartes" cero
(capturas de peces no deseadas que después, muertos, son arrojados al
mar).
En general, las cofradías temen que la reforma pesquera que negocia la Unión Europea "destruya empleos".
Han mostrado, según ha indicado Amigo, su incertidumbre por el futuro
Fondo Europeo que financiará la pesca, porque aunque se mantienen
presupuestos similares, 6.000 millones de euros, Bruselas quiere que no
financie el desguace, ni las paradas biológicas, ni la modernización de
las lonjas.