La edición de esta feria permancerá abierta hasta el próximo domingo 30 de mayo.
El
Viceconsejero de Agricultura de la
Junta de Andalucía, Juan Ignacio Serrano, y el Alcalde de
Baeza, Leocadio Marín, acompañado por el resto de autoridades locales y
provinciales, inauguraron este mediodía la VI edición de la Feria del Olivar FUTUROLIVA Baeza, que este año
abre sus puertas con 137 firmas expositoras. El titular provincial señaló que si
uno de los grandes problemas que tenemos en la comercialización es tomar una
conciencia de grupo, aglutinarnos en torno a zonas importantes de producción
nos permite también diferenciación, ya que no es el mismo producto el que se
obtiene aquí, en Sevilla o en Granada. Cada una de las orientaciones de nuestro
territorio nos permite aunar esfuerzos y aglutinar en definitiva una gran feria
andaluza que reúna todas las producciones.
Serrano
añadió que uno de los defectos que tenemos es la dispersión, con 800 almazaras
vendedoras y 4 compradores, por lo que hay que continuar haciendo esfuerzos por
la concentración de la oferta y esta Feria es una ocasión para, aun manteniendo
la identidad propia de cada producto que es radicalmente distinto, trabajar en
ese escenario de agrupación de los esfuerzos. Otra de las razones que hacen
especial a FUTUROLIVA es que, según matizó el primer edil, Baeza es una zona
que produce más que toda Cataluña, la mitad de Extremadura y un tercio de
Castilla la Mancha,
por lo que muchos expositores vienen aquí porque encuentra mercado de venta y
se movilizan muchos recursos en torno a esa enorme capacidad productora y de
mejora del olivar de la
Comarca de la
Loma.
Y
aunque son tiempos difíciles, el Viceconsejero recordó que el aceite es cierto
que tiene, con respecto al régimen de ayudas, una reflexión importante en
cuanto a la potencia de la industria financiera que se mueve en torno al
olivar, y es la necesidad de un posicionamiento estratégico que refleje el
porqué el aceite a pesar de ser un cultivo es algo distinto, donde prima una
necesidad de legitimación frente al escenario de ayudas comunitarias no solo
del aceite sino del conjunto de las producciones agrarias.
Por
otra parte, Serrano hizo referencia a los precios, donde tenemos una dinámica de
formación en la que, en el conjunto de costes se incorpora también la
subvención como elemento de facilidad de la producción y el precio pasa a tener
posteriormente un ingrediente menor, por lo que el objetivo está claramente en
el incremento de este precio. Tenemos una grasa excelente y no puede ser que se
esté vendiendo a estas cifras; nuestra apuesta es que todos los valores de
calidad que tiene el oro líquido sean capaces de ponerse en el mercado global
pero diferencial. El aceite de oliva es un producto de excelencia y tiene
capacidad para ser valorado como tal por los consumidores. Para ello,
-finalizó- la Consejería
trabaja en líneas como las Denominaciones de Origen, o en la posibilidad de
crear una marca de diferenciación comunitaria a la hora de posicionarse con
claridad en el mercado de exteriores; hay muchísimo trabajo por hacer y mucha
capacidad.