Asaja ha pedido a la Junta de Andalucía que refuerce los controles y aplique sanciones cuando detecte incumplimientos sobre calidad en la venta de los aceites.
El representante del Comité Consultivo de Aceite de Oliva de la Unión Europea (UE) y, a su vez, secretario general de Asaja-Sevilla, Eduardo Martín, ha pedido a la Junta de Andalucía que refuerce los controles y aplique sanciones cuando detecte incumplimientos sobre calidad en la venta de los aceites.
Así lo ha explicado, en referencia a la publicación en el día de hoy de un informe de OCU en el que esta organización de consumidores analizó 40 marcas de aceites y aseguró que 9 "engañan" en su etiqueta.
En opinión de Martín, es exigible que no se produzcan situaciones anómalas en la venta de los aceites porque va en perjuicio del consumidor y de los propios productores, cooperativas, almazaras o industriales "que hacen bien las cosas".
Ha explicado que para perseguir las malas prácticas, "para eso hay controles" de la Administración, un régimen sancionador y la posibilidad de retirar aceites de un lineal si hace falta.
Ha detallado que según el informe de la OCU y las analíticas que realizó y que envió a la Administración para su conocimiento, en algunos lineales españoles se comercializan botellas cuyas etiquetas "no hacen honor ni refleja el producto que está dentro", en referencia a que dicen ser vírgenes o vírgenes extra cuando corresponden a categorías inferiores (o de menor precio).
"Esto daña al sector y no es bueno. Hay que corregirlo", alega.
Ha indicado que la Consejería de Salud es la responsable de hacer los controles utilizando los laboratorios de la Consejería de Agricultura y, de hecho, ha recordado que hace dos años, la Junta andaluza detectó que en muchos puntos de venta "no había coincidencia" entre lo que decían las etiquetas y lo que contenían las botellas, aunque en su opinión se podría hacer mucho más.
Pide por tanto que se incrementen estas inspecciones para acotar prácticas que vayan en contra del producto y del sector, lo que seguirán reclamando ante Gobierno Central, autonómico y ante la Unión Europea.
Ha recordado que el Plan del comisario de Agricultura Dacian Ciolos para el olivar aboga precisamente, a instancias de los productores y de organizaciones como Asaja, reformar los controles y sistema de sanciones, así como por endurecer los parámetros de calidad exigibles para evitar el engaño a los consumidores.
También apuntó que las organizaciones adheridas al COPA-Cogeca (entidad que une a agricultores y cooperativas europeas) han instado en un documento a la Comisión Europea a poner en marcha medidas que refuercen y dinamicen las investigaciones y que se revisen los parámetros químicos o incluso se pongan en marcha otros nuevos para mejorar la calidad y pureza de los distintos aceites.
Asaja también pide que los avances que se logren fruto de estas reformas sobre los métodos analíticos, sean asumidos por el Consejo Oleícola Internacional (COI), como organismo supragubernamental, y puedan aplicarse por tanto de manera homogénea los métodos de clasificación y categorización de los aceites en todos los países.
Una homogeneización de los estándares que evitaría, a su juicio, que se produzcan situaciones que perjudiquen al sector.
Ha reconocido que las noticias que ponen en duda la calidad de los aceites perjudican a un sector "muy sensible" y que "habrá gente que se aproveche de ello", en referencia a los competidores internacionales de España que quieren revalorizar sus propias producciones, caso de EEUU, por lo que deben evitarse vía controles y normativa que se produzcan irregularidades.
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