La Asociación de Regantes de Andalucía considera que el proyecto está disfrazado de una iniciativa de restauración que, nada más lejos de restaurar, agravará el frágil equilibrio del estuario del Guadalquivir
La Junta de Gobierno de la Asociación de Regantes de Andalucía (AREDA), celebrada en Sevilla, ha acordado, por unanimidad, denunciar ante las Instituciones Comunitarias el proyecto de dragado del río Guadalquivir, salvo que el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente informe desfavorablemente y, por lo tanto, paralice la actuación prevista.
El proyecto de dragado del río Guadalquivir, denuncia AREDA, está disfrazado de una iniciativa de restauración que, nada más lejos de restaurar, agravando el desequilibrio que el estuario del Guadalquivir ha venido sufriendo con actuaciones que, bajo el supuesto de limpieza o mantenimiento, han supuesto la alteración del cauce produciendo un incremento de la salinidad. Por ese motivo, AREDA considera inviable una nueva actuación, con la que pretende dar una supuesta entrada a barcos de gran tonelaje y, por lo tanto, aumentar el calado del río, con el riesgo que supone para la supervivencia del cultivo del arroz y de la pesca, actividades que se vienen desarrollando en este tramo del Guadalquivir.
AREDA, que representa a una parte muy importante de los regantes del sector arrocero del Bajo Guadalquivir, entiende que el proyecto es inviable tal y como indican los informes científicos solicitados a tal efecto, lo que supondrá, igualmente, un incumplimiento de la legislación nacional y comunitaria en materia medioambiental.