La campaña atraviesa por estas fechas un momento crítico, hay algunos retrasos por el clima, pero si el tiempo no lo impide se confirmarán las estimaciones que apuntan a producciones abundantes
Los precios de los cereales en los mercados han experimentado un leve efecto de "montaña rusa", con subidas y disminuciones muy puntuales, aunque la tendencia general es a la baja y sin perder de vista las previsiones sobre buenas cosechas.
La campaña atraviesa por estas fechas un momento crítico, hay algunos retrasos por el clima, pero si el tiempo no lo impide se confirmarán las estimaciones que apuntan a producciones abundantes. Por ejemplo, en Estados Unidos el calor extremo en las zonas productoras de maíz y el consiguiente riesgo de menores rendimientos provocó subidas en sus cotizaciones.
El clima afecta a las subidas y bajadas de precios de maíz y soja y a una ligera volatilidad, aunque en casos muy limitados, según varios analistas. Además, la tendencia a la baja se justifica porque en las anteriores campañas había escasez de producto almacenado para abastecer a los consumidores y, en consecuencia, se encareció.
Esta temporada, "las cosechas están sirviendo para que los países exportadores llenen sus existencias y estén tranquilos; el mercado se tranquiliza lo suficiente para que los precios bajen algo", según ha explicado el director de Cereales de Cooperativas Agro-Alimentarias, Antonio Catón. En España, la cosecha "está siendo buena en casi todas las comunidades autónomas, y aunque ha venido retrasada, el resultado va a ser un volumen importante", según Catón.
Cooperativas Agro-alimentarias ha cifrado la producción nacional en 22,5 millones de cereales (incluido el maíz) para la campaña 2013-2014, "muy alta, por encima de la media de los últimos 10, 15 o 20 años". Respecto a los precios, Catón ha señalado que, si bien son bajos, al final para el agricultor lo importante son sus ingresos por explotación. En este sentido, ha añadido, el productor tal vez se vea más favorecido si vende mucha cosecha a precios más moderados que en el caso de que las cotizaciones fueran altas y la producción escasa. Las cotizaciones, ha añadido, "no nos tienen que obsesionar, no dependen de nosotros, lo que sí tenemos que saber es defender un buen precio, porque aún nos queda mucho margen para sacar aún más rendimiento a la cosecha si nos agrupamos y la comercializamos en común, si la oferta es homogénea", según Catón.
La Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (Accoe) ha indicado esta semana que el precio de la cebada y el trigo ha caído en cerca de 60 euros por tonelada respecto al año pasado en Castilla y León -principal autonomía donde se cultivan- y ha señalado que su evolución es "incierta".
El presidente de Accoe, Marcos Martínez, ha manifestado en Valladolid a Efe que los precios son razonables, aunque el agricultor los vea bajos en comparación con la cosecha anterior. Por su parte, el ganadero los considera elevados y denuncia que los piensos no se han abaratado pese a la tendencia bajista del cereal.
En cuanto a su evolución semanal, los precios del trigo blando han registrado una caída del 3,2 % y los de la cebada una disminución del 2,88 % en el comercio al por mayor, según Accoe. La cotización del trigo blando alcanzó 208,85 euros por tonelada (215,76 en la semana anterior), mientras que la de la cebada se situó en 182,5 euros/tonelada (187,97 la semana anterior). En cuanto al maíz, los precios fueron estables y alcanzaron los 235,4 euros/tonelada, al igual que en la cebada de malta (193,3 euros/tonelada), en tanto que los del trigo duro repuntaron un 0,86 %, con 234,2 euros/tonelada (232,2 euros/tonelada la semana anterior).
En la Lonja de Cereales de Barcelona, los precios de la cebada se han mantenido estables (187,00 euros/tonelada) en la última semana, los del maíz de importación han bajado dos euros por tonelada hasta situarse en 226 euros/tonelada para el maíz de importación no comunitaria y en 234 euros/tonelada para el procedente de otros países de la Unión Europea. El trigo ha bajado 5 euros por tonelada, hasta situarse en 205 euros/tonelada para el forrajero y en 210 euros/tonelada para el panificable. Por el contrario, las harinas de soja han subido en Barcelona hasta los 492 euros/tonelada, dos euros más que la semana anterior.
