Las tormentas que se han registrado en los últimos días "han venido bien al fruto" para que éste engorde y ha apuntado que "si sigue lloviendo de vez en cuando y no hace mucho calor, es decir, si se registran temperaturas en la sierra propias del otoño"
La campaña de la castaña en la sierra de Huelva rondará este año las 1.500 toneladas, una cosecha "media-buena" y será de "excelente calidad" si se mantiene el estado que presentan los frutos.
El responsable del sector de la Castaña de COAG-Huelva, José Manuel Benítez, ha precisado que "hay bastante producto en los árboles y que el erizo es de buen tamaño".
Asimismo, ha precisado que las tormentas que se han registrado en los últimos días "han venido bien al fruto" para que éste engorde y ha apuntado que "si sigue lloviendo de vez en cuando y no hace mucho calor, es decir, si se registran temperaturas en la sierra propias del otoño", las previsiones iniciales podrían incrementarse incluso en unas 200 toneladas más. Benítez ha destacado que, en estos momentos, "todo pinta bien, los erizos están bien de tamaño, se ven sanos y presentan calidad" por lo que "la confianza está puesta en la meteorología".
Dicho esto, el responsable de la COAG ha asegurado que con estas buenas previsiones, posteriormente, lo que ha de acompañar es la climatología y el consumo, es decir, "que haya frío para que a la gente le apetezca comer castaña y que demanden nuestro producto, la campaña andaluza, que tiene unas cualidades organolépticas que no presentan otras".
Pero además y, fundamentalmente, ha resaltado, lo que han de acompañar son los precios, ya que el sector lleva varios años soportando unos niveles que apenas si hacen rentable el cultivo. "Esperemos que en el mercado se valore nuestra campaña, la podamos vender a un precio razonable y por lo menos, un año podamos tirar para adelante, con buenos resultados", ha indicado.
Las esperanzas están puestas en esta campaña después de que en la de 2012 se registrara un descenso de producción de en torno al 40 por ciento sin que se llegara a superar el millón de kilos, motivado, fundamentalmente, por la falta de lluvias.
