Miembros de la Asociación Española de Técnicos Cerealistas (AETC) han defendido, en una jornada, la necesidad de elevar las producciones de trigo de calidad en España, para paliar el déficit nacional y la dependencia de la importación.
Representantes de sectores relacionados con el cereal -desde el cultivo hasta la fabricación de harina o pan-, debaten, durante las XXV Jornadas de la AETC, sus retos científicos, tecnológicos y de mercado.
La presidenta de la AETC, Cristina Molina, ha subrayado, en declaraciones a Efeagro, que España, país que consume más cereal que produce, necesita importar mucho, sobre todo las variedades de alta calidad, porque el trigo nacional es "deficiente en proteínas".
"Tratamos de apostar por incrementar los rendimientos para que la importación sea menor", según Molina, quien ha indicado que en España ha sido un reto "reordenar" la producción de trigo hasta conseguir que se oriente a variedades con más cantidad de proteínas.
Por otra parte, se ha referido a la tendencia entre los consumidores españoles a demandar más variedad de panes, por lo que se utilizan nuevos tipos de cereales en su fabricación.
En cuanto a la actual campaña del cereal, marcada por cosechas abundantes, ha confiado en que esa situación "calme" los mercados, ya que en los últimos años el trigo ha sufrido la "volatilidad" en el comercio.
Durante la jornada, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha confirmado la mejora en las cosechas.
Por su parte, el director de Cereales de Cooperativas Agroalimentarias de España, Antonio Catón, ha insistido, en declaraciones a Efeagro, en la necesidad de que el agricultor emplee "semilla certificada" como garantía de pureza.
Catón ha resaltado que el uso de simiente no certificada provoca "problemas de enfermedades y de rendimientos", y que si el agricultor, como empresa, pretende defender su trigo en el mercado necesita ofrecer algo "idóneo" en todo el proceso.
España ha aumentado el "acondicionamiento legal" del grano, con el objetivo de elevar el empleo de semilla certificada, ha dicho.
Sin embargo, ha apuntado que la investigación en este ámbito está en una situación "difícil", pues pocas empresas a escala nacional se dedican a hacer "mejora", ya que "no es rentable, si luego te piratean la semilla y nadie paga" para remunerar ese esfuerzo "de años y años"y no se reconoce bien la propiedad industrial.
Respecto a la actual campaña, ha señalado que es "rara", porque si bien el contexto es de abundancia, la demanda de trigo de calidad para consumo humano procedente de la Unión Europea (UE) es alta y se está exportando mucho, lo que provoca un abastecimiento más "estrecho", así como la consiguiente subida de precio.
En cuanto a la cosecha nacional, este año ha habido "trigos muy buenos" en algunas zonas, pero en general "el tiempo no ha acompañado".
Según Catón, en España se emplea muy poco trigo panadero (entre variedades de harina para panificación y trigo duro para sémola), pues ha cifrado su uso en cuatro millones de toneladas, mientras que el consumo nacional ronda los 30 millones de toneladas.
Pero ha remarcado que la industria harinera "no para de trabajar todo el año" y ya compró la materia prima que necesitaba antes, por lo que si "no acompañamos con producciones de calidad lo tendremos más difícil".
La AETC debatirá también los resultados de la Encuesta Nacional sobre calidad del trigo, que incluyen tanto rendimientos como datos cualitativos relacionados con la transformación en harina.
