Esta disposición ha supuesto una labor de revisión de marcas, logos y dibujos comerciales para asegurar el correcto etiquetado
La llegada de la nueva norma de calidad para la carne, el jamón, la paleta y la caña de lomo ibéricos ha hecho que las empresas comercializadoras de productos derivados del cerdo pongan la lupa sobre sus marcas comerciales para que no induzcan a confusión al consumidor.
El artículo 4 recoge que la marca comercial que se asigne al producto final no podrá inducir a confusión al consumidor, sobre sus características raciales y las condiciones de alimentación o manejo, tanto a través de la propia denominación de marca como de su imagen gráfica.
Esta disposición ha supuesto una labor de revisión de marcas, logos y dibujos comerciales para asegurar aspectos como que, si un jamón está etiquetado con la imagen gráfica de un cerdo o varios cerdos en montanera, haya sido efectivamente alimentado con bellota en dehesa porque, de lo contrario, la empresa tendrá que eliminar dicha imagen.
Grandes empresas en la comercialización de productos del cerdo han señalado cómo están acatando esta normativa tras su entrada en vigor. Desde la Cooperativa del Valle de los Pedroches (Covap), han remarcado que se adaptarán "inmediatamente" a la nueva legislación de etiquetado, "con el margen existente para agotar los stocks". Covap ha subrayado, no obstante, que el "hecho diferencial" de esta cooperativa es la calidad de sus productos, "que provienen de cerdos 100 % ibéricos, criados en las dehesas de encinares y alcornoques".
En la empresa catalana Noel, adaptarán su línea de jamón ibérico a la nueva norma de etiquetado, según ha detallado su directora general, Anna Bosch. No obstante, Bosch ha incidido en que es algo que Noel ya hace porque la Administración "continuamente está elaborando nuevas normas con la finalidad de que haya una mayor transparencia y claridad entre el productor, el cliente y el consumidor final". Bosch es la nueva presidenta del Consorcio de Jamón Serrano, donde están incluidas empresas de alimentación como Argal, Campofrío, El Pozo o Coren.
Según ha manifestado, los asociados del Consorcio de Jamón Serrano velarán para cumplir con el etiquetado, aunque ha apuntado que son las empresas que comercializan ibérico las que tendrán que hacer un mayor esfuerzo para ajustarse a los nuevos requisitos, ya que la nueva norma requiere más información que antes.
Por su parte, el gerente del Grupo Montesano, Martín García, grupo con mataderos en Canarias y Extremadura y que comercializa tanto productos ibéricos como serranos, ha asegurado que en sus etiquetados no se ha "abusado" del uso de imágenes de encinas y bellotas para productos que no se correspondían con ese sistema de crianza y alimentación. Según García, su empresa ha hecho "las cosas por su nombre, por lo que no tenemos problemas" con la nueva norma de calidad.
El grupo Osborne, que cuenta con empresas especializadas en el ibérico como 5Jotas, asegura que la nueva norma permitirá al consumidor tener una mayor información y transparencia, ya que antes había mucha confusión, y a la hora de etiquetar había muchas denominaciones y dibujos que se usaban y podían confundir al cliente. Aunque hay un periodo de adaptación transitoria, a partir de marzo los productos llevarán el precinto adecuado y los que no lo lleven estarán fuera de control y de la norma.
Campofrío, Coren, ElPozo, Covap, Argal o Noel figuran entre los veinte primeros puestos del ránking de los principales grupos cárnicos que operan en el mercado español. Un sector en el que operan más de quinientas empresas especializadas en el negocio cárnico cuyas ventas oscilan entre los 2.000 y 3 millones de euros.
