Almería, Granada y Málaga son las provincias seleccionadas para la realización de un total de 60 controles y diez muestras de todo tipo de vinos
Los inspectores de Consumo de la Junta de Andalucía participarán desde el próximo 15 de junio y hasta el 30 de julio en una campaña de ámbito nacional para comprobar el etiquetado y la información sobre la composición que ofrecen todo tipo de vinos y mostos.
Según ha indicado el Gobierno andaluz en una nota, con esta actuación, se pretende verificar el cumplimiento de los requisitos aplicables a este tipo de productos y "sensibilizar" a fabricantes, distribuidores y a todas las personas que intervienen en su comercialización de la "obligatoriedad" de colocar en los mercados productos "perfectamente identificados" y que cumplan la normativa vigente.
Almería, Granada y Málaga son las provincias seleccionadas para la realización de un total de 60 controles y diez muestras de todo tipo de vinos --como nuevos, de aguja, espumosos y de licor-- y mostos elaborados en Andalucía.
No obstante, si fuera necesario, se podrían inspeccionar productos elaborados en Canarias, Ceuta, Melilla, Murcia o Valencia. Junto con Andalucía, participan en la campaña las comunidades de Extremadura --20 controles de etiquetado y diez toma de muestras--, Madrid --diez controles y diez toma de muestras-- y Canarias --diez controles de etiquetado--.
Los resultados obtenidos en el conjunto nacional permitirán conocer mejor los productos vitivinícolas y su problemática y, de este modo, adoptar medidas para mejorar el sector. Andalucía participa en esta campaña, que es una de las 13 de ámbito nacional previstas para este año y que se desarrollarán en los sectores de productos alimenticios e industriales y la prestación de servicios.
Los controles de etiquetado se centran en los aspectos obligatorios como verificar si figura la categoría del producto, el grado alcohólico, la indicación sobre el origen del vino, los datos del embotellador y del importador en su caso, el número del lote y el volumen nominal.
Asimismo, se comprueba también que estas indicaciones obligatorias sean "fácilmente visibles, legibles e indelebles", y que figuren "al menos" en la lengua española oficial del Estado.
Estos incumplimientos o irregularidades son calificados como "leves" por la Ley de Defensa y Protección de los Consumidores y Usuarios de Andalucía y llevan aparejadas sanciones de entre 200 y 5.000 euros.
En la plataforma multicanal de Consumo Responde y en las redes sociales se puede obtener más información sobre la lectura del etiquetado de alimentos con consejos y recomendaciones, garantías y derechos de las personas consumidoras y usuarias y la forma de ejercerlos.
