El comité europeo de la Cadena Alimentaria y la Salud Animal pide en el texto que los servicios veterinarios nacionales centren sus esfuerzos en la detección temprana de los brotes de gripe a través de una "vigilancia dirigida".
Los países de la
UE aprobaron un documento que dicta las medidas de control
que deben tomar las autoridades de los Veintisiete para evitar la propagación
del virus de la gripe A entre los cerdos.
El comité europeo de la Cadena Alimentaria
y la Salud Animal,
en el que están representados todos los gobiernos, pide en el texto que los
servicios veterinarios nacionales centren sus esfuerzos en la detección
temprana de los brotes de gripe a través de una "vigilancia
dirigida".
En paralelo, solicita que se dé prioridad al control de los
movimientos de los animales una vez detectada la enfermedad en alguna
explotación con el fin de evitar su propagación.
Según se indica en un comunicado, estas medidas se basan en
los principios de "vigilancia, proporcionalidad y flexibilidad".
En su reunión, el comité de la Cadena Alimentaria
decidió además reforzar los controles sobre las peras de origen turco que
entran en la Unión,
después de que los análisis hayan revelado en repetidas ocasiones niveles altos
del pesticida Amitraz.
A partir de ahora, los Estados miembros deberán controlar al
menos el 10 por ciento del total de peras importadas desde Turquía y las
partidas que ya están en el mercado serán sometidas a "exámenes oficiales
adecuados".
Las autoridades nacionales deberán notificar a Bruselas
cualquier resultado anómalo a través del sistema de alerta rápida para
alimentos del que dispone la UE.
Por otra parte, el comité analizó la situación de la
enfermedad de la lengua azul en Europa y certificó la mejora registrada tras
las últimas campañas de vacunación.
Sin embargo, apoyó prolongar durante un año más las actuales
reglas puestas en marcha para combatir la enfermedad.