El acuerdo protegerá el régimen de etiquetado comunitario del vino mediante el establecimiento de una lista de opciones.
El acuerdo para el comercio de vinos
entre la Unión Europea y Australia, que protegerá nombres de caldos
europeos como "jerez", "manzanilla", "champagne" y "oporto" y tipos
como el "fino" o "amontillado", entrará en vigor mañana, informó
la Comisión Europea.
El acuerdo protege el sistema europeo de etiquetado y las
indicaciones geográficas, incluso para vinos destinados a la
exportación fuera de las fronteras de la UE, e incluye un compromiso
por parte de Australia para proteger las expresiones tradicionales
de la UE, indica el Ejecutivo comunitario.
La supresión progresiva de las denominaciones "champagne" y
"porto" para vinos australianos en el plazo de un año es otro de los
aspectos que regula la resolución, que sustituye el convenio firmado
en 1994.
"El acuerdo concede garantías importantes para los intereses
vinícolas de las UE", aseguró en una nota de prensa el comisario
europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, quien afirma que "protege las
indicaciones geográficas y las expresiones tradicionales de los
vinos de la UE en Australia y más allá".
El comisario considera que se trata de un "resultado equilibrado"
que favorece a los productores de vino europeos y australianos.
Bruselas explica que en relación a las denominaciones de origen
Australia deberá dejar de emplear, en el plazo de un años, 12
menciones europeas conocidas de vinos de calidad, entre las que
figuran "jerez", "manzanilla", "champagne" y "oporto".
Los operadores tendrán que dejar de utilizar también en ese mismo
plazo un grupo de seis expresiones tradicionales, entre las que
figuran "amontillado", "fino", "claret" y "oloroso".
El acuerdo protegerá el régimen de etiquetado comunitario del
vino mediante el establecimiento de una lista de opciones que podrán
usarse para la venta de caldos australianos, por ejemplo la
indicación de variedades, relativas a medalla o premio y sobre
colores específicos.
El comercio de vino entre ambas partes es deficitario para la UE
pues mientras que las exportaciones de vino de la Unión con destino
a Australia ascendieron a 68 millones de euros, las importaciones
europeas de caldos australianos alcanzaron los 643 millones de
euros, según datos de 2009.