En 2010 el número de cerdos sacrificados alcanzó los 2 millones y que las previsiones de este año son inferiores.
Los consumidores españoles demandan al año
entre 4 y 4,5 millones de jamones al año, unas cifras a las que hasta
el momento el sector industrial ha podido dar respuesta pero que será
difícil de cubrir en los próximos años.
Julio Revilla, presidente de Iberaice -entidad más representativa en
España del sector industrial del cerdo ibérico-, ha indicado que se
está asistiendo desde el pasado año a unas bajada de campañas
"tremendas".
Esto quiere decir, ha manifestado, que si hace
cuatro o cinco años se sacrificaban por campaña alrededor de cinco
millones de cerdos, en su mayoría de cebo, para la elaboración de
jamones, en los últimas temporadas la cifra se ha reducido más de un 60
por ciento.
En este sentido, ha manifestado que en 2010 el
número de cerdos sacrificados alcanzó los 2 millones y que las
previsiones de este año son inferiores, alrededor de 1,5 millones de
ejemplares.
Según Revilla, con cifras como la de este año "no
se abastece la demanda nacional" ya que "está muy por debajo de las
necesidades del mercado", algo que se comenzaría a notar en unos dos
años, que es aproximadamente, el tiempo de curación que necesita un
jamón de cebo.
El presidente de Iberaice entiende que ante esta
situación el industrial se verá obligado a buscar cerdos "donde no los
hay" lo que provocará una subida del precio de los ejemplares y, por
consiguiente, un aumento del precio del jamón.
Sin embargo, ha
señalado, quizás ese crecimiento en el valor de los jamones no llegue a
ser percibido por el consumidor, sobre todo en el caso de los de cebo,
al entrar en juego las grandes superficies de venta que compiten en
precios.