Los informes de Globefish resaltan que los envíos de pangasius o panga a EEUU aumentan frente al descenso en aquellos destinados a la UE.
La oferta de panga en España -primer
importador dentro de la Unión Europea (UE)- cayó un 19 % en el primer
semestre de 2011, pero el comercio de esta especie sigue ejerciendo
mucha presión en los mercados internacionales de productos pesqueros.
Los informes de Globefish, unidad encargada de información sobre
comercio pesquero de la Organización de Naciones Unidas para la
Agricultura y la Alimentación (FAO), resaltan que los envíos de
pangasius o panga a EEUU aumentan frente al descenso en aquellos
destinados a la UE.
Señalan que la acuicultura española se ve
"cada vez más afectada por la presión de las importaciones de panga y de
perca del Nilo".
Las exportaciones de filetes de panga a los
27 países comunitarios cayeron un 9 % en el primer semestre de 2011, en
comparación con el mismo período de 2010, hasta sumar 95.306 toneladas,
pero en valor crecieron un 5,2 %, hasta situarse en 189,4 millones de
euros, y los precios repuntaron el 14,4%, hasta alcanzar 1,98 euros por
kilo.
La Asociación de Productores de Cultivos Marinos
españoles (Apromar) denuncia la "competencia desleal" por la entrada en
el mercado europeo de pescados alimentados con piensos prohibidos por
las leyes de la UE y procedentes de países que cumplen menos requisitos
laborales o sanitarios.
Los balances de Globefish sobre panga y perca del Nilo reconocen que hay problemas de calidad.
En el caso del panga, cita que grandes cadenas de supermercados
británicas lo retiraron de sus lineales por detectar la contaminación de
aditivos para retener el agua en el pescado.
En cuanto a la
perca del Nilo, ha habido "alertas rojas" por la mala calidad de las
exportaciones de Uganda, lo que propició que la UE amenazara con
prohibir el pescado de ese país.
Brasil está imponiendo más
controles a las importaciones para evitar el fraude, al igual que
Indonesia, aunque en este caso es para potenciar el pescado local.
Las empresas dedicadas al panga en Vietnam, primer productor mundial,
atravesaron problemas de oferta, incrementos de costes y el pago de
intereses altos por los préstamos bancarios.
Este país vendió
al exterior 319.500 toneladas en el primer semestre de 2011, por un
valor de 629 millones de euros, lo que representa un incremento del 28 %
en la facturación, según las cifras manejadas por Globefish.
Asimismo, la Asociación de Exportadores y Productores de Pesca de
Vietnam (VASEP, en inglés) estableció precios mínimos de exportación
para contribuir a que se recuperaran estas cotizaciones.
En
EEUU, el panga ha entrado en la lista de las 10 especies pesqueras "más
populares", porque se "ajusta a los bolsillos" y en el primer semestre
las importaciones de panga (36.000 toneladas, 35.200 procedentes de
Vietnam) se incrementaron el 79 % en volumen y el 105 % en valor.
No obstante, la cuestión en EEUU es si el panga llegará a ser tan popular como la tilapia. Dentro de la UE, el único país que aumentó sus importaciones de panga en volumen fue Holanda ( +6,7 %).
Este pescado tiene más aceptación entre los consumidores de Asia,
incluidos los productores como Bangladesh, Malasia, Indonesia o Myanmar.
En cuanto a la perca del Nilo, es cada vez más cara porque se ha
reducido la oferta de África, con "incertidumbre" sobre el
abastecimiento en 2012 y su repercusión en el comercio de pescados
blancos en Europa.
La UE importó 15.700 toneladas de filetes
de perca en el primer semestre de 2011, pero este pescado pierde cuota
de mercado frente a la tilapia.
Además, los consumidores de
Oriente Medio tienen más interés en la perca del Nilo y están dispuestos
a pagar precios superiores, lo que ha repercutido también en que los
importadores de la UE dispongan de menos existencias.E