Esta posición común compartida tanto por las organizaciones ganaderas de porcino, como por la industria transformadora.
La Asociación Interprofesional del Cerdo
Ibérico (Asici) ha alcanzado un acuerdo sobre la modificación de la
norma de calidad, que incluye entre sus puntos más relevantes la
reducción de las categorías de ibérico a dos, bellota y cebo, y la
simplificación de los requisitos exigibles a cada categoría.
Esta posición común compartida tanto por las organizaciones ganaderas de
porcino, como por la industria transformadora se alcanzó en la asamblea
general de Asici celebrada el pasado 14 de junio en Zafra (Badajoz),
según la Interprofesional a través de un comunicado.
La Interprofesional ha trasladado su propuesta de modificación de
norma al director general de la Industria Alimentaria del Ministerio de
Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Fernando Burgaz, con la
esperanza de que el acuerdo logrado sea recogido en el Real Decreto
sobre esta materia que está preparando el Ministerio.
El
objetivo de la modificación de la norma es garantizar la autenticidad y
las condiciones de producción del cerdo ibérico para asegurar la
calidad, además de establecer mayores sanciones por su incumplimiento y
ante posibles fraudes.
Para ello, Asici ha decidido prohibir
el uso de denominaciones, dibujos e imágenes asociadas al campo o a la
dehesa, así como menciones a la tradición en el etiquetado, marca
comercial o publicidad de los productos que no sean de bellota, para
evitar engaños o confusiones para el consumidor.
Otros
aspectos de la modificación de la norma son el aumento de los controles
de calidad en los puntos clave de la cadena agroalimentaria, la mejora
de coordinación entre las autoridades y competentes y la participación
de la Interprofesional en estas tareas.
En cuanto a la raza,
la norma -que afecta a todos los productos ibéricos elaborados o
comercializados en España- mantiene las denominaciones actuales pero
exige controles más exhaustivos para asegurar la pureza racial de los
reproductores, por lo que el cruce mínimo admitido con la madre ibérica
será del 50%.
En este sentido, los reproductores de la raza
Duroc de tipo cárnico no serán admitidos y, en caso de inseminación
artificial se impondrán controles para verificar a posteriori el
cumplimiento de este requisito.
Respecto al ibérico de
bellota, la nueva norma incluye la reducción de la carga ganadera máxima
actual, para lo que se establecerá un sistema de aforo de todas las
explotaciones de dehesa para adecuar la carga ganadera de éstas a la
producción de bellota en cada zona y también se reducirá el periodo de
sacrificios.
En el cebo se elimina la edad mínima para el
sacrificio, pero se incrementa el límite de peso para ello a los 120
kilos por canal; además de modificarse las condiciones técnicas de las
explotaciones en la fase del cebo, entre las que figura mayores
superficies por animal y los parques en el exterior para la salida
permanente de los animales.
En cuanto al precintado de paletas
y jamones en el matadero, la nueva norma obliga a mantenerlo hasta la
comercialización, incluso en los puntos de venta y restaurantes; y se
establece un sistema de trazabilidad para el producto loncheado y
deshuesado, que se hará constar en los precintos de las piezas para
garantizar la categoría del producto.
Además, la modificación
de la norma recoge el aumento en los periodos de curación de las piezas,
salvo en los lomos, que se propone la reducción a diez días.