Guillermo Pedrosa Calvache
Andalucía Investiga
La empresa malagueña EnerOcean desarrolla diversas
tecnologías para explotar todo el potencial energético que se esconde en las
fuerza de las corrientes y las mareas del océano. Según estos expertos, la
energía marina podría ser la tercera oleada de fuentes renovables, después de
la eólica y la solar.
El océano esconde un potencial energético que aún está por
desarrollarse. La fuerza de las corrientes, las olas y las mareas son una
fuente inagotable para generar electricidad. Las algas y los sedimentos
marinos, a su vez, son una potente materia prima para obtener biomasa, la sal,
la energía eólica-marina... Hay todo un mar de posibilidades. Los expertos en
este campo aseguran que la energía marina puede ser la tercera ola de las
fuentes renovables, después de la eólica y la solar.
La empresa malagueña EnerOcean está sumergida en el
desarrollo de la tecnología necesaria para explotar estos nuevos recursos. Su
presidente y director técnico, Pedro Mayorga, explica: "El potencial
energético del mar se conoce desde antes de que existiera la máquina de vapor, ya
entonces en muchos lugares de Cádiz y Huelva existían molinos de marea, pero
por aquel entonces apenas se desarrollaron".
En la actualidad, existen una gran variedad de tecnologías y
métodos para extraer energía del océano, como por ejemplo las turbinas, que son
semejantes a las de las instalaciones eólicas pero están sumergidas, o el
sistema hydrofoil, que utiliza un dispositivo con forma de ala de avión que
imita el meneo de las colas de los delfines y las ballenas para obtener energía
a partir del movimiento de las corrientes marinas.
Según el experto, éstas y muchas otras técnicas compiten
para convertirse en el estándar de este tipo de tecnologías a nivel mundial. En
este sentido, EnerOcean no apuesta por ningún sistema en particular y sí por
todos en general. "Somos agnósticos en cuanto a tecnología y lo que nos
interesa es encontrar la mejor aplicación para cada caso concreto", añade
Mayorga.
La empresa ha convertido a Andalucía en su laboratorio y
está investigando la viabilidad de diversos sistemas y las posibilidades
energéticas que esconden las mareas y las corrientes de las aguas atlánticas y
mediterráneas.
Atlántico y Mediterráneo
Aunque por el fuerte viento y oleaje de las primeras todo
parece indicar que éstas tienen más potencial, el experto subraya que también
hay un rango de mareas distintas mayor, de hasta 4 metros de diferencia
entre marea alta y baja, lo que dificulta y aumenta el coste de las
instalaciones energéticas en esta parte del océano. Las mareas del
Mediterráneo, sin embargo, son más constantes y dicho rango no llega a los 50 centímetros en
algunas regiones de la costa almeriense.
EnerOcean está desarrollando precisamente en esta zona un
proyecto propio (Waveport) para estudiar la energía del oleaje que hay en los
puertos de Almería. Para ello están colocando medidores en los diques
portuarios con el objeto de conocer a fondo este potencial y saber qué
instalaciones y tecnologías serían más apropiadas para explotarlo.
Igualmente, esta empresa participa activamente en dos proyectos
europeos, uno para verificar la viabilidad de un sistema que funciona a partir
de una serie de placas que la corriente empuja y que tiran de unos cables para
generar electricidad. Y otro para crear una herramienta que sirva para
monitorizar y llevar el seguimiento de las instalaciones de energía marina.
Así, EnerOcean colabora con expertos de todo el mundo
(Asociación Europea de Energías Marinas o la Agencia Internacional
de Energía, entre otros) y con las universidades de Cádiz y Málaga para aprovechar
y desarrollar los recursos interminables e inagotables del océano.