Asaja-Sevilla
El presidente
de ASAJA-Sevilla, Ricardo Serra, ha suspendido al Gobierno de Zapatero, que ha hecho desaparecer
la agricultura de la vida pública, no ha
tenido interés ni habilidad para gestionar los asuntos agrarios y ha incumplido
reiteradamente sus promesas con el sector
ASAJA-Sevilla
ha presentado esta mañana en rueda de prensa el balance del año agrícola y
ganadero 2011 y las prioridades que, para la organización, deben marcar el
sector agrario el próximo 2012. En la rueda de prensa, el presidente de
ASAJA-Sevilla, Ricardo
Serra, ha comenzado haciendo repaso de la legislatura que
acaba de finalizar, que no ha podido ser peor para el sector agrario, que ha
vivido cuatro años de retroceso. La legislatura que ahora se cierra empezó
mal, pues la primera medida de Zapatero fue quitar el nombre al Ministerio que
debía gestionar las cuestiones agrarias, todo un símbolo de lo que iba a ser
esta etapa, en la que la agricultura ha estado desaparecida de los debates y de
la vida pública y sólo ha ocupado titulares con las crisis alimentarias y las
alertas (la e.coli, la subida del precio de los cereales, etc.).
Como ha explicado Serra, ha
sido además una legislatura partida y mal compartida, pues hemos contado con
dos ministras, Elena Espinosa y Rosa Aguilar, y ninguna ha demostrado interés
ni habilidad para gestionar los asuntos agrarios. La primera desaparece de
escena al poco de llegar, cuando Bruselas consagra el cambio de régimen de
ayudas al algodón, y con su mala gestión, la segunda, como ha señalado Serra,
ha hecho buenos a todos los demás, atesorando un paupérrimo bagaje, no
consiguió que se abriera a tiempo el mecanismo de almacenamiento privado para
el aceite de oliva, ha dejado en el cajón la Ley de la Calidad Alimentaria,
que nos la habían vendido una y otra vez como la panacea para equilibrar la
cadena comercial, ha dejado tirado al sector arrocero andaluz olvidando el
proyecto de modernización de su sistema de riego, no ha logrado que ni Alemania
ni la UE
reconocieran los daños al sector hortofrutícola español y andaluz tras la falsa
alarma de e.coli, en su calidad de ministra de Medio Ambiente ha compadreado
con la Junta de Andalucía en todo lo relacionado con la gestión del
Guadalquivir y lo más grave de todo, ha abandonado la defensa de la PAC en Bruselas dejando pasar
el tiempo y navegando entre dos aguas, sin tener una posición propia y sin
preparar documentos, ni estudios, ni informes para defender a la agricultura
española de los graves recortes que va a suponer el cambio de sistema si nadie
lo remedia.
Para Serra el Gobierno se
ha caracterizado por incumplir reiteradamente sus compromisos con el sector,
lo que nos ha llevado a estar peor que hace cuatro años. En este sentido
recordó la promesa del entonces presidente del Gobierno realizada el 29 de diciembre
de 2009, tras la multitudinaria manifestación protagonizada el mes anterior a
nivel nacional por todo el campo español, con la presencia de más de 500.000
agricultores y ganaderos en la capital de España, de poner en marcha un Plan de Choque que nunca llegó.
Según el Ricardo Serra, debió de
ser una inocentada preparada el día antes, día de los Santos Inocentes, ya que
dos años después, se han incumplido los compromisos en los seis puntos que
reunía dicho Plan de Choque: no se han aprobado medidas fiscales estructurales;
el problema de las tarifas eléctricas, lejos de resolverse, se ha agravado; en
materia de precios las actuaciones del Gobierno siguen brillando por su
ausencia; en materia de regulación comercial ha finalizado la legislatura sin
que se produzca la tan pregonada aprobación de la Ley de la Calidad Alimentaria
para equilibrar la cadena comercial; tampoco se ha puesto en marcha el Plan de
Choque Ganadero; se constituyó el denominado Grupo Interministerial sobre el
Sector Agroalimentaria (GISA) pero tras redactar un informe de 21 páginas, no
hemos vuelto a saber nada más de él; en lo concerniente a fiscalidad estamos peor que estábamos
en 2009 y en 2010, pues en 2011 ni siquiera se han reunido las mesas de
fiscalidad que se crearon para aliviar la delicada situación del campo, y ,
por último, respecto a
los planes de activación de la demanda, los esfuerzos que se han hecho han sido
escasos, de hecho en 2011 no se ha dado continuidad a los planes de actuación
que tímidamente se pusieron en marcha en algunos sectores en 2010.
Griñán también
tiene pendientes sus deberes con el campo andaluz
En la misma
línea que el Gobierno nacional, el Gobierno regional tampoco ha hecho los
deberes con el campo andaluz. El Plan de Choque autonómico para salvar de la
ruina al sector, prometido por el presidente Griñán el 26 de octubre de 2009,
cuando se constituyen tres Mesas de Trabajo para reactivar el sector agrario y
consolidar su papel fundamental en la economía andaluza, y cuyo resultado
serviría para alcanzar un Gran Acuerdo Político que permitiera impulsar el
sector de la agricultura en Andalucía, también se ha
quedado en agua de borrajas.
Fruto de estas Mesas de
Trabajo, como explicó el presidente de ASAJA-Sevilla, nació un Plan de Choque
en enero de 2010 que recogía la problemática más importante que afectaba al
sector agrario andaluz (comprendiendo un total de 22 medidas), y que en aquel
momento se iba a llevar al Parlamento de Andalucía para alcanzar un gran
acuerdo político y aportar la dotación presupuestaria suficiente para
acometerlo. Posteriormente, este Plan de Choque pasó a denominarse Documento
de Interlocución Agraria (DIA) y se paró en seco, sin obtener más impulso ni
legislativo ni de dotación presupuestaria, en principio y según la propia Consejería
porque muchas de sus medidas dependían o iban en paralelo con el Plan de
Choque Nacional, que como hemos visto, ha resultado un fracaso. Sorprende, además, que en aquellas medidas en las que el
grado de incumplimiento es mayor son aquellas que dependen directamente de la Consejería de
Agricultura o de algún otro departamento de la Junta de Andalucía, cuando deberían ser, por la
cercanía con el administrado, las primeras que debieran haberse
desarrollado.
En el contexto
internacional, Serra ha destacado que debemos al extraordinario trabajo de
nuestro Gobierno la reactivación del perjudicial acuerdo de MERCOSUR, mientras
que el acuerdo con Marruecos contó con
el voto a favor de la ministra en Bruselas, si bien ahora, tras haberse rechazado
recientemente el la prorroga del de pesca, tenemos una cierta esperanza de que
el Parlamento Europeo no apruebe la renovación del acuerdo agrario.
Respecto a la PAC,
el presidente de ASAJA-Sevilla aseguró que con la que está cayendo en Europa, no
es el momento para acometer ninguna reforma, y menos con un texto de partida
con el que no podemos estar de acuerdo en nada salvo en la declaración, aunque
meramente voluntarista, de que va a mejorar la situación del mercado.
Tras el repaso
a este año que ya termina, Ricardo Serra deseó para el próximo 2012 que España
recupere su peso en las decisiones que se toman en Bruselas, donde hasta ahora
prácticamente no ha existido, ya que en Europa es donde se juega realmente el
futuro del campo español y esto será vital para los próximos quince o veinte
años. En este sentido, desde ASAJA-Sevilla se espera que se pongan al frente
del Gobierno y del futuro Ministerio de Agricultura políticos capaces y con
buena capacidad negociadora, así como que en los próximos tres meses, se
remate la legislatura en Andalucía cumpliendo con los compromisos adquiridos
con el sector agrario.