La extracción del corcho genera en Andalucía un promedio de 30 millones de euros al año y unos 80.000 jornales
Cádiz, una provincia que produce el 11% de la producción mundial del corcho, busca una nueva vía de riqueza con la creación de industrias dedicadas a la transformación de este recurso natural, un material que lo mismo vale para hacer un tapón que una tabla de surf, un zapato o un aislante.
La creación de esta red de industrias de transformación del corcho es una cuenta pendiente en una zona que durante años veía como toda la riqueza que se conseguía con la elaboración de productos del corcho se iba a los lugares a los que la provincia exportaba este material.
La extracción del corcho genera en Andalucía un promedio de 30 millones de euros al año y unos 80.000 jornales, unas cifras que se podrían multiplicar si, después, ese material se quedara en industrias de la zona para su transformación.
El Gobierno andaluz apoya esa veta de desarrollo económico, un apoyo que traduce en subvenciones a empresas como "Corcho Los Alcornocales", un proyecto pionero en la provincia que se ha puesto en marcha gracias a una inversión de 135.855 euros y que ha contado con una subvención de la Junta de Andalucía y la Unión Europea a través del Grupo de Desarrollo Rural de Los Alcornocales.
La secretaria General de Gestión Integral del Medio Ambiente y Agua, Carmen Lloret, y los directores generales de Gestión del Medio Natural, Javier Madrid, y Espacios Naturales, Esperanza Perea, y el delegado territorial de Medio Ambiente de Cádiz, Federico Fernández, han visitado hoy las instalaciones de esta empresa que aprovechará el corcho de peor calidad para emplearlo como material aislante en la construcción o para obtener la denominada "piel de corcho", con la que se elaboran productos similares a la marroquinería.
Los responsables de Medio Ambiente han destacado que con este proyecto se da un paso más hacia la creación de un sector industrial que transforme y obtenga rendimiento de la ingente producción de corcho, especialmente en el Parque Natural de Los Alcornocales. Carmen Lloret ha destacado que el corcho es, junto a la ganadería y la caza, "uno de los principales generadores de renta de nuestras masas forestales con un movimiento económico en torno a los 30 millones de euros".
Se trata ahora de aprovechar las oportunidades de un producto natural que, por sus características físico-químicas, no tiene competidor ya que, por el momento, no se ha conseguido producir artificialmente un producto de sus características.
Tiene un uso potencial hacia numerosos sectores, además del tradicional tapón de corcho, ya que se usa como aislante en la construcción, en la fabricación de materiales de fibra sintéticas, como las tablas de surf, como aislantes para materiales eléctricos o destinados a la industria de la moda, mediante la fabricación de zapatos o mediante el empleo de la denominada "piel de corcho".
Los responsables de la Consejería de Medio Ambiente han visitado también hoy la suberoteca, un espacio ubicado en Alcalá de los Gazules y que reúne 80.000 muestras de más de 1.000 zonas de descorches de Andalucía.
El edificio cuenta con salas de exposición de muestras de corcho, de preparación y clasificación de las mismas, de caldera para cocción del corcho y de experimentación.
