El Gobierno no ha puesto ningún reparto en ningún borrador, sino que se trata de cifras que Portugal ha publicado internamente.
El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, ha criticado a Portugal por anunciar, unilateralmente, un reparto de pesca de la sardina en el Atlántico, en el que los barcos lusos se llevarían una mayor proporción, sin consultarlo antes con España.
Domínguez ha reaccionado así, en declaraciones a los medios de comunicación, a preguntas sobre las negociaciones para poner tope a las capturas de sardina en aguas ibéricas y a los últimos documentos que han circulado. En este sentido, ha remarcado que el Gobierno no ha puesto ningún reparto en ningún borrador, sino que se trata de cifras que Portugal ha publicado internamente.
Según documentos manejados por el sector, si se pusiera una cuota a la sardina un 72 % sería para Portugal y un 28 % para España. "Nosotros negociamos con Portugal desde hace tiempo y, por eso, nos vemos sorprendidos desagradablemente porque ha puesto una cuota unilateral que no se corresponde con ningún acuerdo celebrado con España", según ha señalado Domínguez en una jornada sobre pesca sostenible, organizada por la patronal Cepesca.
El secretario general ha transmitido al sector español "un mensaje de tranquilidad" porque el Gobierno defenderá su posición y argumentará los esfuerzos que la flota nacional ha hecho en años anteriores, como los límites diarios de capturas "a diferencia de otros países" que no las acotaron. "Salvaremos nuestros derechos y defenderemos la posición que el sector español merece", ha añadido.
En cuanto a las cifras manejadas con Portugal, ha explicado que se trata de una norma interna de ese país que correspondería con lo que consideran histórico, pero "evidentemente" si nunca pusieron topes "tienen más capturas, pero no han contribuido a la conservación de la sardina"
No obstante, ha apuntado que es preferible que España y Portugal lleguen a un acuerdo para limitar la pesca de sardina "para que no pase el caso de la anchoa" (en referencia a los años de cierre en el Cantábrico) y, además, si no hay consenso la Comisión Europea impondría un Total Admisible de Capturas.
Bruselas ha dado la oportunidad, según Domínguez, para que ambos países se pongan de acuerdo respecto a dicha limitación, que afecta al Golfo de Cádiz, aguas portuguesas, Galicia y el mar Cantábrico.
